Tu ropa interior volverá a ser blanca como la primera vez. Con este super truco.

Conforme los gustos de cada quien, se elige como vestir, aunque de manera muy particular confieso que en lo que más invierto tiempo es en elegir la ropa interior. Los encajes, los colores y texturas simplemente me encantan, sobre todo aquellos tonos oscuros pues me parecen más sensuales y que resalta más el tono de mi piel, pero claro, nunca puede faltar la ropa interior de color claro, sobre todo blanca, pues es el color que sin duda alguna se habrá de utilizar quizás con mayor frecuencia.

Y aunque un sujetador o bragas de color blanco hacen lucir pulcra y tierna, también es cierto que terminan perdiendo el encanto cuando como por arte de magia aparecen con diversas manchas, algo muy característicos de los colores claros; en el momento menos esperado la limpieza ya no es característica de tu ropa interior.

Incluso, por más que uno la cuide y aunque tengan poco uso o tiempo, las prendas de color blanco terminan haciéndose amarillas o grisáceas. Olvídate de utilizar algún producto con demasiados químicos que sea agresivo, recuerda que las telas cada vez  son más delicadas y es por eso que queremos compartirte un increíble truco para que ya no corras el peligro de gastar una fortuna en algo que te durará solo unas cuantas puestas.

OJO: dicho truco se ha llevado acabo con la ayuda de un sujetador pero puede ser utilizado en cualquier otra prenda y los resultados serán igual de grandiosos.

Increíble truco para blanquear la ropa interior blanca:

1 bandeja grande de plastico
1 cucharada de carbonato de sodio
2 cucharadas de sal
Agua tibia (no caliente)
1 cucharada de detergente

Agrega la bandeja agua tibia y los demás ingredientes. Remueve con cuidado hasta lograr una mezcla homogénea. Enseguida introduce tu prenda en ella y déjala remojar de 15 a 20 minutos aproximadamente. Si tu ropa se encuentra muy percudida, puedes dejarla un poco más de 20 minutos sin rebasar los 30.

Dentro de la mezcla puedes frotar en repetidas ocasiones para lograr limpiarla a mayor profundidad.

Para finalizar, enjuaga con agua tibia y sácala al sol para que se seque.

Este truco puede ser igual de eficaz para cualquier otra prenda de color blanco y lo mejor de todo es que no las daña y el resultado simplemente es maravilloso. Tus prendas lucirán limpias y con un blanco envidiable.