¿Eres obsesivo con tu perro? 8 Señales que indican una adoración extrema por tu amigo de cuatro patas





Para los amantes de los animales, las mascotas forman parte de su familia. Indudablemente, ellos necesitan de afecto, cariño y cuidado, tanto como un niño pequeño. Sin embargo, algunas conductas podrían ser extremas.





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Así como lo dicen, los perros son los mejores y más fieles amigos del hombre. Pero, para las personas con el Desorden Obsesivo por los Perros (O.D.D., por sus siglas en inglés), son mucho más que mascotas.

¿Cómo saber quiénes están obsesionados por sus perros? A continuación, te diremos los principales signos que determinan esta obsesión:

1. Tu perro es miembro de la familia y lo tratas como tal.
Tu perro es más que compañero, un fiel amigo, tu cómplice de travesuras que nunca te regañará. Es ese ser de 4 patas que siempre ha estado para ti y nunca te defraudará. Para todos nuestra mascota es una compañía invaluable, pero hay personas que exceden de su adoración por ellos.

Algunos los obligan a hacer cosas de humanos como sentarse en una silla para comer o mecerlos para dormir y, esas personas, probablemente estén obsesionadas con su mascota.

2. Hablas con tu perro y él demuestra que te entiende.

Después de un día difícil, todos se necesitan desahogar. Algunos lo hacen con sus parejas, padres, amigos y otros con sus mascotas.  Es frecuente decir palabras para drenar el estrés con nuestras mascotas; sin embargo, no se considera normal establecer una conversación fluida y responder a los gestos que tu mascota te da, como si fuera una persona.

Tu perro simplemente lame y escucha y ladra en ocasiones, esto es una respuesta de atención a su amo más no que está comprendiendo tu problema. Si te ve triste él te alentará, por el contrario, si estas animado también lo sentirá, lo que tu perro te demuestra es empatía.






3. Duermes con tu perro.

Estás acostumbrado a acurrucarte con tu pareja, hijo o cualquier otra persona de afecto y si adoras a tu perro probablemente ya estés acostumbrado a dormir con él.  Si sientes la necesidad de abrazarlo toda la noche, sentir su calor y su corazón latir. es quizás tengas ODD.

4. Constantemente te tomas selfies con tu perro.

Normalmente, las personas acostumbran a fotografiarse con sus perros, pero si desplazas a otras personas por tomarte siempre fotos con tu mascota, es un signo clave de que estás obsesionado con tu perro. Aunque, sin duda, siempre tendrás una hermosa foto de perfil.

5. Publicas en sus fotos un párrafo de cuán perfecto es.

Para todos nosotros nuestros perros son perfectos. Sin embargo, muchos piensan que sus mascotas son seres supremos sin ninguna imperfección. Este pensar se ve reflejado en los constantes textos de adoración a tu mascota o al justificar todas sus fallas.  Aunque nunca habrá suficientes palabras para expresar este gran amor, muchos se obsesionan con su presencia.

6. Le explicas a tu perro por qué hueles a otra mascota.
Muchos piensan que se deben disculpar con su perro por haber acariciado a otro. Algunos creen que tocar a otro perro significa engañar a tu mascota. Este sentimiento de engaño es muy característico de las personas obsesionadas con su perro.

Los expertos aseguran que para los perros esto no significa una ofensa. Ellos solo sentirán el deseo de oler momentáneamente y, de hecho, una vez que te cambies de ropa, se les olvidará que acariciaste a otro.





7. Tienes fotos de tu perro en un marco o en tus álbumes de fotos familiares.

Las familias generalmente solo tienen fotos enmarcadas de sus hijos y otros miembros de la familia en sus paredes. Pero, las personas con ODD tienen a sus perros en marcos especiales que incluso figuran más que sus familiares de sangre.

8. Siempre quieres visitar tiendas de mascotas y llevar a casa más perros.

Cada vez que pasas una tienda de mascota y no te resistes a la tentación de entrar y comprarle un regalo a tu perro, probablemente padezcas de ODD. Muchas personas reemplazan sus propios placeres por complacer a sus perros, aunque no debe ser así, lo ven como normal. Tu perro siempre querrá que lo premies, pero no siempre es bueno hacerlo, hazlo solo como recompensa.

Aunque no es mortal, tener una obsesión por tu mascota no es sinónimo de bienestar. En general, las obsesiones son comportamientos peligrosos para el estado de ánimo. No debes dejar de querer a tu perro y consentirlo, pero cuidado con los excesos, para él tampoco será bueno crear dependencia. 




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