Muchas parejas piensan que pueden tener relaciones perfectas pues nunca discuten, en la vida es inevitable que no existan diferencias entre las personas, mas aún en las parejas que conviven, comparten y se desarrollan juntas.
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Es a través de las diferencias que aprendemos a tolerar, a corregir, a ser flexibles y a transformar cosas en nuestra propia vida y en nuestra pareja, por que el crecimiento personal y el aprendizaje, no puede darse de la misma manera cuando jamás existe un escenario con conflicto.
El mito de la pareja perfecta…
De seguro has escuchado muchos conceptos sobre lo que puede significar una pareja perfecta, confianza plena, libertad individual, comunicación perfecta y oportuna, perfecta reciprocidad, compatibilidad intima en el mayor grado y para de contar los motivos, que conducen a la supuesta perfección.
Sin embargo, el ser humano es complejo y lo que satisface a uno no necesariamente satisface al otro, generalmente en una relación donde no existe problema alguno, una de las dos partes de la pareja suele reprimir, se cohíbe de manifestar lo que siente y desea y en muchos casos ocurre de parte de ambos miembros de la pareja, pues la perfección no radica en complacer ni en el placer de vivir a gusto en cada momento, mas bien se encuentra en la realidad de afrontar juntos las situaciones y salir airosos, estar conscientes de que habrá momentos amargos y recuerdos no tan agradables, pero aún así vale la pena mantenerse en la lucha junto a ese ser que amamos.
La pareja perfecta real…
Se refiere a aquella que suele enfrentar dificultades, que además provienen de la sinceridad y honestidad de tener la capacidad de expresar aquello que les incómoda o les genera malestar.
Se conforma de la participación activa de ambos miembros, en detectar, aceptar y buscar la solución a sus adversidades, los que atraviesan lloviznas y tempestades y su amor permanece intacto, mantienen la disposición de caer y levantarse, se tienden la mano y se acompañan lo que los convierte en una pareja realmente consolidada ante todo en la vida.
Generalmente se han enfrentado a grandes vivencias, han logrado superar las situaciones más duras y continúan luchando, por amor, por solidaridad y por el otro.
Determinar la perfección de una pareja es algo prácticamente imposible, pues lo que hace feliz a unas personas no hace felices a otras, pero algo si es común en estas relaciones, la perfección no tiene que ver con bienestar, sino con entereza ante la vida, ante las situaciones y ante la capacidad de siempre tomar en cuenta al otro y contar con el para afrontar la vida.
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