Las mujeres queremos vernos siempre radiantes. Sin embargo, muchas veces las hormonas, la edad, o el uso de diversos productos cosméticos, nos juegan en contra y nos provocan manchas en la piel. El cuello, los codos y las axilas suelen ser los lugares donde más difícil es quitar una mancha de la piel. Pero con estos sencillos trucos, ya no tendrás de qué preocuparte.
Culturalmente, la mayoría de las mujeres occidentales llevamos las axilas depiladas. En muchas organizaciones de bandera feminista, llevar las axilas sin depilar suele ser sinónimo de liberación femenina y estandarte de resistencia. Mientras tanto, el común de las mujeres, buscamos que nuestras axilas, además de depiladas y suaves, no se vean oscuras. Tremendo reto. Pero no es imposible.
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¿Por qué se oscurecen las axilas?
Según el sitio Actitud Fem, las axilas se oscurecen por el uso de desodorantes, las células muertas que se acumulan en la piel, el tipo de depilación que usamos, hábitos de limpieza, genética, etc. Por lo tanto, para mantenerlas libres de manchas existen una serie de trucos caseros. También los codos y rodillas son zonas propensas a mancharse, por lo que la limpieza y exfoliación de estas partes del cuerpo suelen ser el primer paso para lograr la blancura deseada.
El sitioBaúl de Ideaspropone algunas soluciones para liberar cuello, axilas y rodillas de las tan temidas manchas.
Limón y pepino
El limón es una de mis frutas favoritas, pues sirve para muchas cosas. Es astringente, clarificador y purificador. Para blanquear las axilas es un excelente aliado, que, al mezclarlo con pepino, lograrás resultados sorprendentes.
Para ello, simplemente debes machacar un poco de la pulpa del pepino, mezclarlo con jugo de limón y cúrcuma, y dejarlo actuar en las axilas por unos 20 minutos. Al instante notarás la diferencia.
Limón y miel
Como decíamos, el limón es un gran clarificador, pero también es suavizante. Si lo mezclas con un poco de miel y lo aplicas en las rodillas, tendrás unas rodillas suaves y claras. No olvides, a la hora del baño, fregar siempre tus rodillas con una espoja exfoliante, para remover células muertas. Esta mezcla no sólo sirve para las rodillas, sino también para las axilas y el cuello.
El aloe es una de las plantas curativas más utilizadas en el mundo. Mi abuela tenía en el jardín de su casa, y recuerdo que fue el único remedio que me funcionó en mi adolescencia para remover el acné juvenil. En este caso, te lo recomiendo especialmente para la zona del cuello, que muchas veces olvidamos exfoliar y humectar. Antes de conseguir un gel preparado en farmacias, es mejor buscar una planta y tenerla en casa. Así, podrás cortar la hoja (siempre quitando las espinitas de los bordes) y aplicar el gel directamente sobre tu piel.
Azúcar y limón
El azúcar actuará como exfoliante, cuando no tienes niguna mascarilla a mano. La mezcla de azúcar y limón dejará la piel de las zonas de cuello, rodillas y axilas como la piel de un bebé. Es fácil, rápido, y muy efectivo.
Prevenir es mejor que curar
Ahora que ya sabes estos trucos, puedes emplearlos en casa todas las semanas, para que el resultado sea progresivo y más efectivo. Sin embargo, el mejor consejo es no olvidar esas zonas del cuerpo que se manchan fácilmente, y dedicarles especial atención a la hora del baño.
Elige una esponja que sea de tipo exfoliante, para remover excesos de piel muerta, y nunca olvides humectar esas zonas. En la zona de las axilas, por ejemplo, dale un respiro a tu piel y no uses tanto desodorante en el día. Trata de elegir un momento del día en que puedas poner una crema humectante a la piel de las axilas, pero que sea lo más natural posible, pues es una zona muy sensible.
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